A las barricadas!!

Hoy he tenido el privilegio de asistir a una charla con Rosa María Calaf, ex corresponsal de TVE.
Con casi 40 años de labor periodística a sus espaldas, esta mujer me ha dejado fascinada, ya no sólo por su nutrida experiencia como periodista, también por su profesionalidad, su fuerte personalidad, su caracter decidido, su íntegro sentido de la ética y su particular visión y amor por esta profesión. Calaf es una de esas periodistas en peligro de extinción, una lince de la información. Y toda una aventurera.

Ahora jubilada "a la fuerza", como nos ha comentado ella misma, Rosa (si me permite tutearle) aprovecha el tiempo para viajar y dar conferencias y charlas sobre periodismo en diversas universidades, como hoy lo hiciera en la UMA. Su último trabajó como corresponsal para TVE1 fue en la región Asia Pacífico. Aunque anteriormente había sido corresponsal en Moscú, Viena, Buenos Aires, Nueva York, Canadá y Roma. 

Durante la hora y media de charla que hemos pasado con ella, absortos en sus palabras (algunos más que otros) pero todos con una sonrisa en la boca de escuchar sus palabras. Nos ha hablado de la situación actual del periodismo, de la precariedad laboral que atraviesa el sector mediático, de la banalización de la información y también nos ha recordado que nosotros somos el futuro, que no podemos dormirnos en los laureles, que tenemos que reaccionar y tratar de luchar por un buen producto, por una información de calidad enfocada al servicio público y no a los intereses económicos de los propietarios de los medios de comunicación. Escuchar a personas como Rosa María Calaf provoca ese gusanillo del gusto por el periodismo, provoca la casi inocente ilusión de darse cuenta de que aún estamos a tiempo de cambiar el mundo, de trastocar los acontecimientos venideros y luchar desde las trincheras informativas por un periodismo de auténtica calidad. De retomar el 4º poder que en los últimos años los grandes lobbies mediáticos y el tratamiento sensacionalista de la información han mermado hasta hacerlo parecer una caricatura de sí mismo. 

Nosotros, estudiantes de periodismo y recien licenciados tenemos que "atrincherarnos" y no ceder, luchar por el futuro de esta profesión y arrebatarle el poder de la información a los que la han prostituido y la han vendido al mejor postor, basándose en agendas, dejando de lado temas realmente importantes, porque "no se venden" o porque no quieren que se vendan. Porque prefieren tenernos "lobotomizados" y bombardeados de información sobre el "American Way of Life" antes que alentarnos a desarrollar una perspectiva crítica de la situación real que nos rodea. Durante su charla, Calaf ha nombrado a Chomsky, "Los guardianes de la libertad", una radiografía del sistema mediático vendido al servicio propagandistico de la élite política; Si trasladamos esto al panorama actual y escaneamos nuestros medios, nos daremos cuenta de que  la cantidad de temas "propios" de los medios ha descendiendo considerablemente, y los pocos que hay están más basados en tramas políticoeconómicas de dudosa credibilidad (debido al partidismo informativo y la llamada "tendencia política") que  aprovechar la gran herramienta que es un medio de comunicación para denunciar abiertamente cuestiones que son realmente serias e importantes. Periodismo al servicio del marinero no del patrón.
Si un medio abre con una información, la competencia no va a ser menos, y así haciendo "zapping" podemos observar cómo las noticias (aunque enfocadas de distinta forma) son en esencia las mismas en TVE que en LaSexta.
Sin información de calidad, sin periodistas que salgan a buscar la noticia, a hurgar y a meter el dedo en la llaga, los medios de comunicación no serán más que meros instrumentos al servicio de la propaganda sociopolítica de partidos y lobbies corporativistas. 

Hay que poner fin al periodismo de redacción. Al periodismo de "corta y pega".

Compañeros... ¡A las barricadas!

Aquí os dejo el audio del extracto de una charla que dio Calaf para "periodismohumano". En apenas 40 segundos analiza la situación de los medios y la sociedad y nos alienta a luchar por una auténtica libertad.
No es un espejismo utópico, es una realidad al alcance de nuestra mano. Nosotros somos el presente, pero también el futuro.